EN LAS AFUERAS DEL COLEGIO J.G.O, TODAS LAS MAÑANAS, SE REGISTRA UN CAOS VEHICULAR.

LUEGO DEL INCIDENTE DE LA SEMANA PASADA EN LA QUE UNA ALUMNA DE ESA INSTITUCIÓN EDUCATIVA FUE ATROPELLADA, SE HA REDOBLADO LA SEGURIDAD PARA EL CONTROL VEHICULAR, PERO HAY OBSERVACIONES PUESTO QUE LOS EFECTIVOS, LEJOS DE REALIZAR SU LABOR ESTÁN CONCENTRADOS EN OTROS TEMAS.

Las madres de familia de la Institución Educativa José G. Otero, están preocupadas por el intenso tráfico que se produce en el malecón Gálvez, en las afueras frente a la puerta principal de este plantel, su preocupación aumenta porque la semana pasada una niña de ese colegio, fue atropellada por una combi, aunque el incidente no pasó a mayores, temen que algo más grave se pueda producir.

FALTA SEÑALIZACIÓN.

El grupo de madres que brindó declaraciones para Radio Tarma, coincidió en que faltan señalizaciones de tránsito; faltan las “líneas de cebra” (cruceros peatonales), señalizaciones que indiquen que es “zona escolar”, que indiquen la velocidad a la que deben desplazarse los vehículos, entre otras, reclamaron.

MUY DISTRAÍDOS.

Otra de las observaciones que realzaron se debe a la actitud de los serenos y policías que son asignados para ejercer el control de tránsito en el sector y cautelar la seguridad de los escolares. Por ejemplo, esta mañana, estaba un efectivo policial y un sereno, pero ambos, lejos de cumplir su labor, atentos a lo que sucede, se encontraban conversando amenamente.

Si solo se encuentra un efectivo, lo que hace es más estar concentrado en su celular, lejos de ejercer el control de tránsito que deberían de realizar. Las madres piden que los efectivos estén atentos a lo que sucede. Hay conductores y pasajeros que se han acostumbrado a bajar por el lado izquierdo, cuando lo correcto es que se haga por el lado derecho.

Es más, al instante en que se realizaba el reporte había varios vehículos estacionados en el sector, cabe señalar que ahí existe una línea amarilla que indica que es zona rígida, pero no se respeta, ante la vista y paciencia de los efectivos del orden. Si bien el vehículo tenía encendidas las luces intermitentes, el mismo efectivo policial reconoció que el auto estaba estacionado por más de media hora.

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